Humor - página 375

 
Te gustan los calcetines, es un tema delicado
 
 
 
evillive:

Sí... La conclusión es impresionante. Hay un pueblo en Rusia que se llama Beryozovsky, así que lee cómo lo llamaría un perezoso...
 
 

Revisando viejos papeles, me encontré con correspondencia de estudiantes de las clases: poemas por doquier. Hubo algunos buenos.

Los discursos de los flacos, es la primera joroba.
Durante tres días no he comido más que pan en la cantina.
Sólo hamburguesas temblorosas con agua cruda
Y a veces un trocito de pollo... (с)

 
granit77:

Revisando algunos papeles viejos, me encontré con correspondencia de estudiantes de las clases: poemas por todas partes. Hubo algunos buenos.

Los discursos delgados, ya la primera joroba
Durante tres días no he comido más que pan en la cantina.
Sólo fudge en un batido con agua húmeda.
Y a veces un trocito de pollo... (с)

como éste, por ejemplo:
No como tú sueñas, No una mujer tan triste, Que lee hermosos libros, Vendrá a atormentarme con charlas, Sin embargo, Mezheumitsa, me hace languidecer en la imitación: Ese héroe no besa así, No abraza así en el romance. Y una cosa me consuela, Que en el amor, disputando con las páginas de los libros, Rechacé con determinación Las tradiciones literarias.


	          
 
 

Es invierno. Un campesino con sombrero amarillo
Regañó la intemperancia del caballo...

***

Un hombre en una cita con el oftalmólogo.
Oftalmólogo:
- Creo que tienes que dejar de masturbarte.
- ¿Por qué?

- Me impide examinarte.

***

El hombre que envasa la cocaína estornudó ayer 2,5 millones de dólares en el trabajo.

 

Un inglés perdía dinero en las carreras todo el tiempo.

Entonces, un día se dio cuenta por fin de lo que tenía que hacer para llevarse las grandes ganancias.

No había apostado durante seis años. En seis años acumuló seis mil libras.

Y seis años después, el día 6 del sexto mes, el día de la gran carrera de Londres, se levantó a las 6 de la mañana,

llamó a un taxi con el número 66-66 a propósito, fue al hipódromo, dio seis chelines de propina al taxista,

fue a la sexta oficina de reservas, y puso la totalidad de las 6.000 libras en la sexta carrera para el sexto caballo.

Y el caballo quedó sexto.