La cotización del petróleo vuelve a situarse en línea con los mínimos del año registrados el pasado verano, cuando los temores sobre la ralentización económica en China dispararon todas las alertas en los mercados financieros.
La cotización del barril de Brent, de referencia en Europa, acelera sus caídas en la jornada de hoy y cotiza por debajo ya de los 42,2 dólares registrados hasta ahora como sus cuotas más bajas de todo 2015. En año y medio acumula un descalabro próximo al 60 por ciento.
El precio del barril tipo West Texas, de referencia en Estados Unidos, agrava en mayor medida aún sus descensos, y ahonda su desplome por debajo de la barrera de los 40 dólares. Los descensos en la sesión de hoy se aceleran hasta rozar el 3% y dejan nuevos mínimos por debajo incluso de los 39 dólares.
Los inversionistas prolongan así las caídas con las que reaccionaron el pasado viernes, al conocerse el resultado de la cumbre de la OPEP. La falta de acuerdo en el seno de la Organización de Países Exportadores de Petróleo impidió cambio alguno en las cuotas oficiales de producción. La próxima cumbre no tendrá lugar hasta junio de 2016.
A pesar del actual exceso de oferta de bombeo en el mercado, los países productores no lograron un acuerdo que equilibre en mayor medida la oferta con la demanda actual. Los analistas destacan en este sentido que la propia OPEP incumple su techo oficial de producción, fijado en 30 millones de barriles diarios, y sitúan su bombeo real alrededor de los 31.5 millones de barriles. Las firmas de análisis calculan el exceso de oferta entre 0.5 y 2 millones de barriles diarios.
Esta situación podría agravarse en los próximos meses, a raíz del levantamiento de las sanciones a Irán por su programa nuclear. Una vez que entre en vigor este fin de las sanciones, Irán, en su día el segundo mayor productor de la OPEP, sólo por detrás de Arabia Saudí, podría aumentar sus exportaciones de crudo hasta en un millón de barriles diarios.
La negativa de Irán a frenar el inminente auge de sus exportaciones agravó si cabe las reticencias de los países de la OPEP a acordar unos mayores niveles de control de su producción.
La Reserva Federal también podría jugar en contra de la remontada en el precio del petróleo. Los datos de empleo publicado el pasado viernes en Estados Unidos constataron la fortaleza del mercado laboral estadounidense, y reforzaron las expectativas de una subida de tipos en la reunión que celebrará la Fed el próximo 16 de diciembre.
En un intento por anticiparse a la primera subida de tipos en Estados Unidos desde el año 2006, los inversionistas han frenado en seco las últimas subidas del euro. Los analistas coinciden a la hora de vaticinar nuevas subidas del dólar, la divisa que monopoliza el mercado del petróleo.